La dermatitis atópica es una enfermedad pruriginosa, crónica y recidivante, que afecta principalmente los pliegues; se presenta durante la lactancia, y reaparece en escolares. Es rara en adultos. Suelen encontrarse antecedentes familiares de atopia y alteración de la piel que culmina en una piel seca, junto con aparición de asma o rinoconjuntivitis. Intervienen factores constitucionales, genéticos, inmunitarios, metabólicos, psicológicos, y cambios en la barrera cutánea.
Hay tres fases cronológicas:
1. La fase del lactante, entre las primeras semanas de vida y los 2 meses de edad. Predomina en las mejillas.
2. La fase del escolar o infantil: de los 4 a los 14 años, generalmente afecta los pliegues de codos, rodillas, cuello, muñecas, párpados o región perioral.
3. La fase del adulto: de los 15 a los 23 años. En superficies de flexión de codos, rodillas, cuello, nuca, dorso de manos o genitales.
En el tratamiento, lo más importante es quitar la comezón y restablecer la barrera cutánea.
Depende de la severidad del cuadro, del sitio en el que se presenta, se deberán dar medicamentos específicos prescritos por el dermatólogo, para controlar lo más rápido posible el cuadro agudo.
